Indulto sospechoso

La pregunta que uno debe hacerse en este momento es, por qué el gobierno de Alan García Pérez indulta a José Enrique Crousillat.

¿Porque está viejito como dicen? ¿Porque es navidad y hay que ser humanitario con las personas mayores? ¿Porque, como dicen a sus 77 años, el señor Crousillat padre sufre los achaques de la cardiopatía hipetensiva ansioso y depresiva y hay que ser dadivosos ahora que estamos en navidad? O porque simplemente lo que se busca es experimentar cómo reacciona el país frente a un beneficio que en un futuro cercano podrían darle también al ex dictador Fujimori, que de paso también tiene problemas de su salud.

-Usted cuando no con su pesimismo de siempre…

Es que hay que decirlo mi amigo… en este país todo puede pasar. Además, acuérdese que fue el APRA quien auspició a Fujimori cuando el chinito era un total desconocido. Porque eso de que es por razones humanitarias es un tremendo cuentazo –como decía Esopo- porque José Enrique Crousillat López no está enfermo, y eso lo ha dicho el congresista Daniel Abugattas –que al menos para eso es bueno-.

Pero caramba, si Crousillat fue el corrupto empresario de América Televisión quien vendió su línea editorial por más de 60 millones de soles, que el mismo Vladimiro Montesinos le entregó fajo a fajo, contante y sonante, y que todos vimos por televisión.

Quién entiende este país de cangrejos.

El poder judicial se gasta un montón de plata persiguiendo al corrupto fugado, metiéndole juicio para que devuelva los 69 millones de soles que se llevó. Lo sentencian a 8 años de prisión por delitos de corrupción, peculado y asociación ilícita para delinquir; pasa un año y el mismo gobierno le perdona el delito, ¿por qué, porque es amigo de Fujimori?

Qué grave para un sistema democrático que está ya minado de corrupción y que hace todo lo posible para ser ineficaz y más corrupto cada vez.

Sería bueno que Alan le dé una miradita a los archivos de APRODEH y a la lista de los penales dónde hay un montón de gente detenida injustamente y que ni siquiera han recibido sentencia y que en verdad la pasan mal, aún con mayor edad que la del señor Crousillat y hasta con enfermedades terminales.

CDH/EQM