lunes, 30 de julio de 2012

El discurso oncológico de Humala

Durante su discurso de Fiesta Patrias el presidente Ollanta Humala ha prometido un Seguro Oncológico Gratuito para todos los peruanos. Parece una buena noticia. Pero no se sabe si el gasto será por única vez o si será la base para invertir cada año en un tratamiento que sobrepasa los 200 mil soles en transplantes de médula ósea. Recordemos que el gerente de la Liga Peruana de Lucha contra el Cáncer, José Méndez, advirtió que no hay país que cubra el 100% de tratamiento y que la atención de seis meses con un biomedicamento puede costar entre y 150 mil dólares por persona.

Otro tema que llama la atención del discurso es el pedido demagógico de reconocer constitucionalmente el derecho del agua. Tiene razón Lourdes Flores cuando dice que ese tipo de discursos disminuyen a un líder. ¿Existe alguien en el Perú que no tiene derecho al agua o a la energía eléctrica? ¿Con esa lógica cambiaría en algo el conflicto de Conga? 

El problema en Cajamarca es que el mismo Humala  prometió agua antes que oro. Ahora ofrece oro antes que agua. Lo menos que puede hacer Humala es sincerarse y asumir el error, dar la cara y establecer mejores canales de comunicación entre la población. Cosa que para un presidente militar resulta difícil. Por el contrario no encuentra mejor camino que aislarse en la desconfianza absoluta y la creencia de que los programas sociales son el mejor camino para el desarrollo. Puede serlo. Pero luchar contra la corrupción y acabar con las trabas que impiden el desarrollo en las regiones y la supervisión en la distribución de los presupuestos también es importante.

El hecho de no mencionar el caso de Conga en el mensaje de 28 y dejarlo pasar no soluciona el problema sino lo desdeña gravemente. Es confuso. Ollanta Humala cambia su plan de la gran transformación por la hoja de ruta. Asume el gobierno y jura por la Constitución de 1979, pero gobierna con la de 1973. Un año después sostiene que se ha sentado las bases de la gran transformación y propone el derecho del agua, que es lo que piden los cajamarquinos y es lo que el gobierno no puede cumplir. Cómo se entiende.

Además acaba de anunciar la Ley de desarrollo docente a fin de incluir mejoras remunerativas a través de la meritocracia. ¿Eso no es lo mismo que la Carrera Pública Magisterial que reconocía mejoras económicas a los maestros a través de la constante evaluación? Qué se va hacer con los maestros que están en la carrera pública y segunda de la ley del profesorado. ¿Se crearán varios regímenes como en el sistema de pensiones?  La reforma de las AFP nunca se discutió y se aprobó sabiendo que estos días estaríamos pensando en otros problemas y que nadie lo recordaría. 

En un año Humala no ha podido ni siquiera asistir más de una vez a las reuniones de la Comisión de Seguridad Ciudadana del Congreso y eso sí era importante para todos.  Cómo se va enfrentar la delincuencia y el sicariato en Lima. Los 3 mil millones de las sobreganancias mineras fueron un engañamuchachos cuando en realidad no llegaban ni a la mitad. De eso no dice nada el presidente. Es necesario el orden para no perder más credibilidad especialmente en Cajamarca.


CDH/EQM

viernes, 20 de julio de 2012

La reforma inconstitucional de las AFP

La reciente reforma de las AFP sí perjudica a los afiliados. ¿Por qué? Porque  si bien es cierto que ofrece una comisión más baja ese beneficio será sólo por dos años. Después el costo por administrar las pensiones de los trabajadores será la misma. ¿Entonces cuál es el beneficio de la reforma promulgada por el presidente Humala?  Al parecer ninguno.
A pesar que lo prometió el mismo Humala, el tema de la comisión por saldos no se ha discutido. La comisión por saldos no es otra cosa que la libertad para que las AFP se cobren sus servicios, ya no descontados del sueldo del trabajador, sino del mismo fondo personal. Lo que significa que el costo por administrar las pensiones de la mayoría de peruanos estaría asegurada para las administradoras. Pero la novedad que no dice el congresista Jaime Delgado es que el referido pago se hará así el trabajador esté desempleado.
La diferencia cuando al empleado se le descuenta el pago de comisión para la AFP de su sueldo es que el monto que recibe su fondo siempre será uno determinado a su capacidad de ingreso. Por ejemplo si gana mil y le descuentan 100, de esos 100 el ahorro a su fondo serían 80 -descontando el pago de comisiones-. Éste es un ejemplo fácil. Pero si el descuento sale de los fondos, el total mensual será cada vez menos para efectos de interés, así ingrese un monto cada mes.
El proyecto aprobado a empujones por el Ejecutivo también es incostitucional porque los fondos de pensiones en el Perú son intangibles. Ni siquiera para el pago de reparaciones civiles se tocan.  ¿Por qué el Congreso no lo discutió? La reforma pretende ingresar a todos los peruanos, incluyendo los independientes, a un sistema de previsión entre las AFP u ONP, lo cual es más catastrófico. Cómo podrá el ministerio de Economía o la SUNAT garantizar el pago regular de un comerciante minorista o mayorista. Casi no tiene sentido. Tendría que crear un sistema exclusivo para los independientes.
Es como la propuesta del mismo MEF de tantear un impuesto al ahorro. Sí los independientes ingresan a la ONP terminarán por quebrar un sistema autárquico que de por sí ya está quebrado y que nadie fiscaliza en el país.
El proyecto no es claro, no determina una verdadera competencia en el monopolio interno de las AFP, y es posible que como en otros países el ganador de la licitación más barata sea un tercero crado por el mismo grupo de las administradoras que después tendría que ser solventado por el gobierno. Y aquí hay que ser claros, el gobierno tendría que durar más de 5 años para garantizar esa promesa sin saber de dónde solventa sus programas sociales,  más aún cuando reconoce -en privado- que sus promesas de candidato no se encuadran al presupuesto del país.
El Tribunal Constitucional tendrá que evaluar la incostitucionalidad de la ley promulgada irresponsablemente sin un debate previo, y emitida justo en medio de una serie de conflictos mal manejados, en medio de expectativas con el próximo cambio de gabinete, y muy mal calculada para soplarla por debajo de la mesa de los peruanos.



CDH/EQM

viernes, 6 de julio de 2012

La factura del candidato Humala

El presidente Ollanta Humala y sus ministros no saben cómo solucionar el conflicto antiminero de Cajamarca. Y no lo saben porque están experimentando. El cambio de radical a continuador de las políticas económicas de los últimos años cobra la factura. Son 17 fallecidos hasta la fecha. Podría no estar mal ese cambio pero hay que reconocer que fue una irresponsabilidad toda la carrera política de Humala al asumir el mismo papel que ahora protagoniza Gregorio Santos en Cajamarca. 

Pero lo grave en Humala no es su impericia ante las protestas sino su falta de humanidad frente las víctimas mortales que reclamaron lo que él reclamó y promovió con ellos en vida durante su campaña.

Humala no tiene el valor para despojarse de su ego presidencial y pedir que los dirigentes cajamarquinos -politiqueros o no- se acerquen a Palacio a dialogar o al menos para intentarlo -siquiera como una muestra de tino político así sea en vano-. Los cinco muertos en Celendín, con infiltrados del MOVADEF incluidos, tienen que ser motivo de explicación. Y Humala tiene que dar la cara, no se puede esconder en las faldas de la primera dama que sale -modosita ella- a pedir la unidad del país.

Que el presidente aparezca luego de 48 horas y lamente las muertes en Cajamarca y los excesos de la policía, con Marco Arana, a quien torpemente han convertido en un falso héroe, no es exactamente esa explicación que el país necesita. Utilizar el rescate de los niños pioneritos secuestrados por terroristas en San Martín de Pangoa muestra la pobre intensión del gobierno para lavarse la cara cuando las papas queman. Cómo hará con los reclamos del SUTEP, con la huelga del INPE, las incursiones terroristas, el MOVADEF infiltrado cada vez más en Juliaca -donde lanzaron perros muertos a las pistas-y en las universidades del interior.

Es necesario el presidente Ollanta Humala haga un mea culpa público por ese cambio de política que negoció para llegar al poder, y que a la vez le dio la espalda a miles de peruanos que errados o no creyeron en él. Tiene que reconocer que se equivocó y ser enérgico en explicar los beneficios de su cambio. Si no hace eso Humala seguirá dando tumbos junto con sus ministros como hasta hoy lo hace. A menos que su plan sea dejar que el Congreso y la clase política tradicional se desprestigien mientras él espera mudo para volver a su primera gran transformación que subliminalmente anuncia en cada inauguración.

Es terrible esa la fragilidad al interior de Gana Perú. La primera vicepresidenta Marisol Espinoza declara que el premier Valdés está con las horas contadas por su ineficacia en Cajamarca y de esa forma nos muestra las pugnas de poder entre los nacionalistas. ¿Para quién iba el mensaje? ¿Para Humala o para Valdés?.

Acaban de elegir a monseñor Cabrejos como mediador para el tema de Conga. De esta forma se deja en manos de la Iglesia lo que el mismo Humala no puede manejar. Qué tanto podría mediar Cabrejos si Roque Benavides ya adelantó que no garantiza el mantenimiento de las lagunas y que los 10 mil puestos de trabajo están por evaluarse. Si esos ofrecimientos no están claros cómo puede salir Humala a decir que Conga sí va.

Lo que es cierto es que si el Congreso aprueba la Ley Santos habrá cometido otra gran torpeza. Vacar a una autoridad sólo por estar de acuerdo con la protesta de un poblador sería como si se pudiera vacar al presidente por el escándalo de un congresista de su partido. Hay una extraña atracción en el gobierno por las torpezas.


CDH/EQM